Por Vanessa Yurkevich, CNN
Los puertos estadounidenses han experimentado caídas en las importaciones a nivel de pandemia, por lo que las buenas noticias sobre los aranceles eran justo lo que esperaban los funcionarios portuarios.
El miércoles, pareció que los minoristas y los puertos obtendrían precisamente eso, ya que un tribunal bloqueó muchos de los aranceles del presidente Donald Trump. Sin embargo, el jueves, un tribunal federal de apelaciones suspendió rápidamente esa decisión.
Este tipo de cambio radical subraya por qué, incluso cuando hay noticias de una flexibilización de los aranceles, las mercancías no empiezan a fluir a los puertos estadounidenses de inmediato. Y eso podría significar menos productos en los estantes de las tiendas en los próximos meses, lo que reduciría la oferta disponible y elevaría los precios para el ciudadano común.
“Creo que se esperaba que, de repente, todo volviera a entrar. No creo que se haya visto esa prisa por volver a importar todo, porque creo que la gente sigue siendo cautelosa sobre cómo procederá esto”, dijo Jonathan Gold, vicepresidente de cadena de suministro y política aduanera de la Federación Nacional de Minoristas.
Incluso después de que Trump redujera los aranceles a China del 145 % al 30 % a principios de este mes, los puertos más grandes de Estados Unidos aún no han experimentado una recuperación. El Puerto de Los Ángeles reportó una disminución del 30 % en las importaciones durante la última semana de mayo en comparación con el año pasado. La Alianza de Puertos Marítimos del Noroeste, que representa a los puertos de Seattle y Tacoma, afirma que las importaciones también cayeron un 30 % entre la última semana de abril y la primera semana de mayo, y el volumen es significativamente menor en comparación con el año pasado.
Luego, la decisión del miércoles por la noche de un tribunal estadounidense en Manhattan sembró un nuevo caos en el panorama comercial. El fallo bloqueó una serie de aranceles de Trump, incluyendo un arancel del 10 % sobre la mayoría de las importaciones y los aranceles más altos para China, México y Canadá. La Casa Blanca presentó una apelación y, el jueves por la tarde, un tribunal federal de apelaciones restableció los aranceles hasta que ambas partes presenten argumentos por escrito a principios del próximo mes.
Esta dinámica ya es bastante confusa para cualquier minorista que intente hacer negocios, especialmente cuando tiene que planificar con semanas o incluso meses de antelación.
“Es como un ping-pong. Intentamos entender qué funciona y qué no. Por lo tanto, es muy difícil para los minoristas planificar con antelación”, dijo Gold.
Mientras los minoristas permanecen confundidos, menos contenedores se dirigen a los puertos estadounidenses. El arancel del 30 % a China ya estaba resultando demasiado costoso para que muchos minoristas importaran más inventario a Estados Unidos, según Gene Seroka, director ejecutivo del Puerto de Los Ángeles. Alrededor del 45% de la carga del puerto proviene de China.
Quienes pueden afrontar el costo están enviando productos ya fabricados, pero no se están realizando nuevos pedidos a fábrica, dijo.
“Con el efecto descontrolado de la información que sigue saliendo sobre política comercial y aranceles, muchos siguen adoptando una actitud de esperar a ver qué pasa”, declaró Seroka a CNBC el jueves.
La situación está mejorando para el Puerto de Los Ángeles, aunque lentamente. En la primera semana de junio, se espera la llegada de 96.000 contenedores de carga grandes, frente a los 69.000 de la última semana de mayo. Para la segunda semana de junio, se esperan 106.000 contenedores. Esto representa un aumento, pero aún así representa una pérdida del 9,4 % con respecto al año pasado, según datos del puerto.
“Estamos lejos de alcanzar la situación prevista para las dos primeras semanas de junio. Aún tenemos 10 salidas canceladas de llegadas de buques programados para junio; la mitad de ellas en la primera semana”, declaró Seroka. “Por lo tanto, no estamos viendo un repunte como algunos analistas habían pronosticado ni un gran aumento. Es un repunte moderado para recuperar el nivel anterior”.
No se trata solo del costo, sino que las empresas también enfrentan una presión de tiempo. La pausa de 90 días en los aranceles recíprocos vence el 9 de julio, y la pausa de 90 días con China vence el 12 de agosto.
“Noventa días de esta prórroga es poco tiempo en nuestro sector. Ese es normalmente el tiempo que se tarda en realizar un pedido, tener los productos fabricados y listos para enviar a Los Ángeles”, declaró Seroka.
Aun así, algunos expertos afirman que podría producirse un aumento repentino, pero es difícil predecir cómo se manifestará.
“Probablemente no habrá un problema con los estantes vacíos, pero creo que habrá costos adicionales que podrían repercutir en los consumidores, porque lo que estamos viendo es que toda esta incertidumbre tiene un costo”, dijo Daniel Hackett, socio de Hackett Associates, una empresa de estrategia marítima y logística comercial.
Varios grandes minoristas, como Walmart, Home Depot y Target, ya han anunciado que aumentarán los precios para mitigar el impacto de los aranceles.
“Hay cadenas de suministro, y les gusta la previsibilidad. Les gusta la certeza”, dijo Hackett. “Es solo que la incertidumbre está sumando costos, como mínimo”.
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Los aranceles de Trump están bajo amenaza, pero los puertos aún no se recuperan. Malas noticias para los precios News Channel 3-12.
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